Chand, un hombre mayor modesto con una sonrisa fácil, dedica 30 horas a la semana como voluntario como compañero senior de AmeriCorps. Asignado a una persona específica con necesidades especiales en uno de los programas diurnos bajo contrato con el Centro Regional de North Bay, Chand encarna el espíritu de compasión y servicio comunitario.
Todos los días, Chand camina desde su parada de autobús hasta el programa diurno United Cerebral Palsy en Rohnert Park, ubicado a menos de una cuadra de distancia. Al entrar al edificio, su sonrisa se ilumina cuando el personal y los clientes lo saludan. Se mueve por las grandes instalaciones para guardar sus artículos personales en un casillero antes de encontrarse con su compañero asignado, Patrick, para comenzar su día como voluntario acompañante senior.
Chand había traído dos tarjetas para que Patrick las coloreara, una actividad sencilla pero significativa. Él preguntó atentamente: "¿Quieres colorear los cupcakes o el dragón?" Con paciencia, Chand esperó mientras Patrick se concentraba en los contornos del papel. Finalmente, Patrick seleccionó un marcador magenta y comenzaron juntos su sesión creativa.
Patrick, como muchas personas atendidas por el Centro Regional de North Bay, tiene una discapacidad intelectual que hace que las tareas rutinarias y la comunicación sean más desafiantes. Cada cliente tiene un plan de asignación personalizado con objetivos específicos que ha identificado. Algunos pueden necesitar ayuda adicional para realizar la transición entre actividades, mientras que a otros les puede resultar difícil ser comprendidos.
"Nuestros voluntarios están un paso más allá del promedio en carácter y compasión", dice Melissa Slama, quien supervisa el programa. “Trabajar con personas que tienen discapacidad intelectual requiere características especiales. Obviamente, es una zona sin juicios. Estamos aquí para agregar amistad, apoyo y significado. Se necesita paciencia y compasión sin prisas para esperar diez minutos mientras una persona se pone su propio abrigo para salir a caminar, pero es un nivel importante de independencia que merece estímulo. Cuando ves el orgullo y las sonrisas en sus rostros, te das cuenta de que lo que acaba de pasar fue realmente importante”.
La hora del almuerzo de hoy incluye una caminata hasta un restaurante de comida rápida cercano. Los voluntarios senior nunca están a cargo de sus compañeros y siempre están supervisados. El personal del programa diurno crea los horarios y las actividades, mientras que los voluntarios de Senior Companion brindan estímulo perspicaz y repiten las instrucciones según sea necesario. Como ojos y oídos adicionales, los voluntarios están en una posición perfecta para informar al personal si alguien está teniendo un día difícil.
Los voluntarios de AmeriCorps son únicos porque reciben un estipendio exento de impuestos, lo que les permite trabajar como voluntarios sin incurrir en costos personales. También reciben una comida diaria y un reembolso por el viaje hacia y desde su sitio. Este apoyo financiero ayuda a las personas mayores de bajos ingresos a mejorar su calidad de vida económica y socialmente.
El programa ofrece capacitación para nuevos voluntarios, capacitación en servicio mensual, licencias remuneradas y vacaciones. Cualquier persona interesada en obtener más información sobre el programa debe comunicarse con Melissa Slama, supervisora del programa Senior Companion, en 707-566-3005 or melissa@nbrc.net.